Cuidado de la piel.
1. Limpieza
El objetivo es que la piel esté limpia como una patena, sin restos de maquillaje del día anterior ni cremas. Puedes hacerlo con agua micelar o utilizando geles limpiadores.
2. Mascarilla y exfoliantes
Ahora de lo que se trata es de renovar tu piel para que se vea como nueva. ¿Cómo? Aquí también te proponemos dos alternativas: un exfoliante que retire las células muertas, suavice la piel y purifique los poros como los de la gama Azúcares Suaves —aptos para rostro y labios— o bien las mascarillas para la cara de la línea Arcillas Puras de L'Oréal Paris que combinan una limpieza intensa con el delicado cuidado de una crema. Puedes combinar y alternar ambos tratamientos, pero recuerda: este paso, máximo tres veces a la semana.
3. Tónico
Aunque muchas veces nos lo saltamos, el tónico es muy importante en nuestra rutina de cuidados premaquillaje porque, además de refrescar, elimina las impurezas que hayan podido quedar y nos ayuda a controlar la grasa.
4. Momento ampollas
Son el paso clave para que tu piel tenga un aspecto 10 y tu maquillaje se eleve a la máxima potencia. Las ampollas con ácido hialurónico de Revitalift Filler son un tratamiento hidratante de 7 días que le dará un “boost” de jugosidad a tu piel, rellenándola donde más lo necesitas. Y otra ventaja: como vienen en formato monodosis, si un día no vas a pasar por casa, al bolso y listo.
5. Sérum
El sérum es como añadir belleza sobre belleza, es decir, potencia los efectos de todo lo anterior. Dependiendo del que elijas, también puede tener acción antiarrugas, revitalizante e incluso iluminadora. Vamos, un imprescindible en tus cuidados.
6. Contorno de ojos
De poco vale que apliques varias capas de corrector si no te ocupas antes de la delicadísima piel que rodea tus ojos. Hazle un hueco al contorno en la estantería del baño porque será tu mejor arma contra los signos de expresión y fatiga en esta zona. ¿Qué te aporta? Hidratación, menos bolsas, menos ojeras… ¡Obligatorio!
7. Crema de día
Puede que antes fuera tu primer paso, incluso el único, pero la realidad es que la crema de día con SPF es el punto y final de una buena rutina premaquillaje. No solo refuerza la hidratación de los demás cuidados sino que protege tu piel frente al fotoenvejecimiento y ayuda a evitar la aparición de manchas provocadas por la exposición solar. Elige la más idónea según tus necesidades —¿has probado a hacerte un diagnóstico personalizado con Skin Genius?— y no olvides extendértela también por el cuello.
Ahora sí que estás lista para maquillarte y, además, como tu piel está de lujo, incluso puedes aficionarte al efecto no makeup. ¿Qué tal si empiezas mañana mismo?